"Silvando mambo" es un tema instrumental de 1956, que también aparece en la película "Al son del Mambo", con la participación de Rita Montaner, Amalia Aguilar, Resortes y Las Dolly Sisters, entre otros artistas.
lunes, 27 de febrero de 2012
Pérez Prado - Silbando mambo (1956)
Dámaso Pérez Prado (Matanzas, Cuba, 11 de diciembre de 1916 - Ciudad de México, 14 de septiembre de 1989), el "Rey del Mambo", fue un músico, compositor y arreglista cubano.
"Silvando mambo" es un tema instrumental de 1956, que también aparece en la película "Al son del Mambo", con la participación de Rita Montaner, Amalia Aguilar, Resortes y Las Dolly Sisters, entre otros artistas.
"Silvando mambo" es un tema instrumental de 1956, que también aparece en la película "Al son del Mambo", con la participación de Rita Montaner, Amalia Aguilar, Resortes y Las Dolly Sisters, entre otros artistas.
Mayra Marti - Caminito de mi pueblo (1967)
Palabras de Pedro Montes sobre este disco de Mayra:
Se conjugan en este álbum las primeras páginas que recogieron la más sublime y expresiva dulzura interpretativa de quien habría de constituirse, en joven figura de alto relieve en el difícil mundo del cancionero hispano: MAYRA MARTI.
Hoy les presentamos el conocidísimo tema “Caminito de mi pueblo”, obra de ese prolífico compositor venezolano, ya fallecido, el maestro Gilberto Mejías Palazzi, y que en la voz de Mayra suena con otro estilo, pero de hermosa entonación y sencillez.
CAMINITO DE MI PUEBLO
Cuando se pierde la tarde, caminito de mi pueblo,
una tristeza suspira, en la noche que se acerca.
Y es el recuerdo que llega envuelto en una oración,
mientras se pierde en el aire una luz de evocación.
Caminito de mi pueblo que me separa de tí,
caminito de mi pueblo que me va acercando a tí,
llévame pronto a su lado que comienza a anochecer,
caminito de mi pueblo llévame.
(se repite este párrafo).
Cuando se pierde la tarde, caminito de mi pueblo,
una tristeza suspira en la noche que se acerca.
Y es el recuerdo que llega envuelto en una oración,
mientras se pierde en el aire una luz de evocación.
Caminito de mi pueblo que me separa de tí,
caminito de mi pueblo que me va acercando a tí,
llévame pronto a su lado que comienza a anochecer,
caminito de mi pueblo llévame.
(se repite este párrafo).
Caminito de mi pueblo llévame.
Los Tres Sudamericanos - Ende que te vi (1960)
El nombre de "Los 3 Sudamericanos", es el trampolín de una carrera que iniciaron Casto Darío, Alma María Vaesken y Johnny Torales, quienes desde el principio solo conocieron el éxito y los aplausos, actuando en principio en escenarios de la Argentina, para luego conquistar Europa y otros continentes. Con Los 3 Sudamericanos se estableció Casto Darío en Buenos Aires en 1960, donde actuó en varias radioemisoras y televisión, además de grabar tres discos de larga duración, cuyos títulos, Los Tres Sudamericanos, Canciones del Paraguay, y Navidad con Los Tres Sudamericanos, todos para el sello CBS, alcanzaron notables ventas y éxitos, ya que empezaron a sonar en todas las emisoras de la Argentina y España.
El tema que hoy les presento, "Ende que te ví", es una tonada de la autoría deLuis Bahamonte y que forma parte del segundo disco de larga duración grabado en 1960 por este famoso trío, "Los Tres Sudamericanos, El Cantar de Sudamérica", con el acompañamiento de la orquesta de José Carli
ENDE QUE TE VI
Un día de mañanita, salí a recorrer la hacienda,
Y me topé con mi prienda, que se encontraba solita.
Le dije al punto m'hijita, tú sabes cuánto la quiero,
Yo soy un huaso sincero, que su amor le solicita
Y espero que usted permita, que sea su amor primero.
Estribillo:
Ende que te vi, que te quiero,
Ende que te vi, que te adoro,
Ende que lo ví, mi lucero,
Ende que lo ví, mi tesoro.
Corre que te te, que te tengo que querer,
Corre que te te, que te tengo que adorar,
Corre que te te, que te tengo que querer,
Aunque tu mama no me quiera ver.
No tengo mucho dinero, para empezar el ranchito,
Pero le juro y repito, que soy un huaso sincero.
Ensillo mi pingo overo y salgo a buscar fortuna
Y antes que me cuenten una, me recorro el mundo entero,
Para eso, tan solo espero, el sí de su boca, ¡ay! juna.
Ende que te vi, que te quiero,
Ende que te vi, que te adoro,
Ende que lo ví, mi lucero,
Ende que lo ví, mi tesoro.
Corre que te te, que te tengo que querer,
Corre que te te, que te tengo que adorar,
Corre que te te, que te tengo que querer,
Aunque tu mama no me quiera ver.
Pérez Prado - El reloj Sincopado (Sin año)
El Reloj Sincopado (The syncopated clock), es una pieza de música ligera compuesta por el compositor norteamericano Leroy Anderson en 1945, mientras prestaba sus servicios en el ejército en la Oficina de Inteligencia Militar en Washington. Este tema se volvió un favorito de las orquestas "pops".
Aunque el tema es instrumental, existen versiones cantadas con la letra que en 1951, le agregara Mitchell Parish.
De su disco "El Rey del Mambo", les ofrecemos la versión instrumental del Reloj Sincopado, al estilo de Pérez Prado y su orquesta.
Mayra Marti - Campanitas (1967)
Quizá para algunos, la maestría técnica alcanzada por la voz actual de la Voz de Oro y de Diamante, desmeritaría escuchar estas primeras grabaciones. Sin embargo, creo que es todo lo contrario. Es verdad, que los cantantes nunca tienen la voz igual a como cuando estaban más jóvenes o niños, porque la destreza vocal va madurando con los años, y la respiración, la afinación perfecta, la modulación, la interpretación y los matices, son habilidades que se adquieren con el paso de los años y de largas prácticas y ensayos, con repertoristas, orquestas, maestros de canto, directores, adquisición de conocimientos musicales y hasta de actuación.
Por ello, escuchar estas canciones de la voz casi niña de Mayra, nos puede llenar más de regocijo que de extrañeza, porque podemos vislumbrar ya, el don vocal que luego se convertiría en modulación preciosa de esta cantante venezolana, que empezó tan joven a grabar y a dejar su estela de éxitos.
El tema que hoy les ofrecemos, que parece para niños es “Campanitas” de seguro inspirada en el personaje de Walt Disney de homónimo nombre, con unos efectos de cristales, cuya alta fidelidad fue posible reproducir gracias al sonido masterizado con tecnología actual. El compositor de este bonito tema es ese prolífico compositor venezolano, ya fallecido, el maestro Gilberto Mejías Palazzi.
CAMPANITAS
Campanitas, campanitas que al sonar,
van alegres anunciando un repicar,
Campanitas musicales, con mil tonos de ilusión.
Las escucho por la tierra, por el mar,
confundidas con la brisa en su cantar,
anunciando la mañana, con su alegre repicar.
Yo quisiera confundirme en el cantar
de sus notas musicales y soñar,
y viajar entre la lluvia, bajo el sol,
con las lindas campanitas.
Con sus frágiles sonidos van y van,
por la tierra, por el viento y por el mar,
anunciando la mañana y alegrando la ciudad.
Yo quisiera confundirme en el cantar
de sus notas musicales y soñar,
y viajar entre la lluvia, bajo el sol,
con mis lindas campanitas.
Con sus frágiles sonidos van y van,
por la tierra, por el viento y por el mar,
anunciando la mañana y alegrando la ciudad.
Alberto Cortéz - A dónde diablos (1985)
Alberto Cortez (Rancul, provincia de La Pampa, 11 de marzo de 1940), es un compositor , cantante y poeta argentino. Reside con su mujer en Madrid.
Es conocido por muchos como "El Gran Cantautor de las Cosas Simples".
Alberto Cortez escribió el siguiente comentario sobre el orígen de su tema "A donde diablos", que pertenece al albun de 1985, "Entre Líneas:
Cita:
Dicen por ahí que los que escribimos especialmente versos somos muy desordenados que llenamos nuestros bolsillos de papelotes con ideas sueltas que muchas veces no pasan de ser eso, ideas sueltas cuyo destino debería será la papelera, porque no encuentran continuidad ni desarrollo nunca.. Puede que sea cierto, pero la gente debe comprender que cuando aparece una idea para un poema uno no puede permitirse el lujo de dejarla escapar o abandonarla. Debe conservarla para disfrutar de ella en otro momento más propicio e incluso para tratar de componer el que será el más grande poema que se haya escrito jamás. Pero si nuestros bolsillos siempre están repletos de papelotes, nuestra mesa de trabajo es el caos, al menos la mía lo es. Un auténtico campo de batalla. Aquí hay de todo, ideas, direcciones, números telefónicos, versos empezados e inconclusos y debajo de la mesa una papelera ávida de recibir la sobrealimentación de un ataque de orden que nunca llega. Un día buscaba ansioso unas estrofas que había escrito a modo de introducción para un poema dedicado a “ella” como todos y pese a mi esfuerzo y desesperación no aparecieron y en ese busca que te busca, se me ocurrió la idea de escribir estos sobre lo que me estaba pasando. |
¿A dónde diablos
habré metido yo los versos que tenía
sin terminar, sobre mi mesa todavía
aunque no fueran más de cinco o seis vocablos?
¿A dónde diablos?.
¡Es culpa mía!
aunque haya muchos para hablar del mismo tema
eran los justos moradores del poema
que para ti voy escribiendo cada día,
¡Es culpa mía!.
Se han extraviado
quizás al ver que eran metáforas en celo
fue su sonrisa golondrina en pleno vuelo
que sigilosa mis apuntes se ha llevado.
¿Qué diablos digo?
si solamente con abrir una ventana
y ver el sol que en tus cabellos se derrama
regresan prontos del olvido mis olvidos,
¿qué diablos digo?.
Para nombrarte
prefiero usar el corazón al diccionario
porque de siempre es el que lleva el inventario
de tantas cosas con que suelo compararte
para nombrarte.
Sencillamente
te llamo luna, cascabel o caracola
y ya me tienes en la cresta de la ola
buscándote por los espacios transparentes.
Pero..., ¡qué diablos!
si eres la vela que me empuja a mar abierto
eres el debe y el haber de mis aciertos
eres la exacta dimensión de mis retablos,
pero..., ¡qué diablos!.
A la deriva
si no pudiera refugiarme en tu mirada
navegaría mi razón incontrolada
a la deriva, sin timón, a la deriva.
Sería un milagro
si yo encontrara aquellos versos que tenía,
sin terminar sobre mi mesa todavía.
¿A dónde diablos estarán?, ¿a dónde diablos?.
martes, 21 de febrero de 2012
Los Tres Sudamericanos - La flor de la canela (1960)
Los 3 Sudamericanos fue un trío musical paraguayo, formado en 1959 por Alma María Vaesken, Casto Darío Martínez y Johnny Torales. El nombre de Los 3 Sudamericanos lo adoptaron cuando fueron convocados por Columbia Argentina para grabar en Buenos Aires un álbum, que tuvo un gran éxito en Argentina, aunque en Paraguay recibió algunas críticas porque los temas tradicionales paraguayos fueron interpretados con arreglos modernizados. Decidieron radicarse en Argentina para continuar grabando. Antes de viajar Alma y Johnny debieron contraer matrimonio, ya que ella era menor de edad.
A principios de la década de los 60 viajan a España, donde adquieren una enorme popularidad y donde finalmente se instalan en 1965. Quince años después, Casto Darío abandonaba la formación lo que precipitó el definitivo declive del grupo.
Del disco de 1960, "Los 3 Sudamericanos, El Cantar de Sudamérica", y de la autoría de la gran Chabuca Granda, Los Tres Sudamericanos nos ofrecen "La flor de la canela", popular tema que ha sido interpretado por muchos artistas, tanto en versiones cantadas como instrumentales. Los Tres Sudamericanos lo sacaron de nuevo en un EP fechado en 1966 como se ven en las portadas adjuntas.
La flor de la canela es un vals peruano compuesto por la cantautora Chabuca Granda y que se ha convertido en una de las más representativas del Perú.
Chabuca Granda registró como la fecha final de su obra el 7 de enero de 1950. Esta canción fue la que la lanzó a la popularidad. Siempre se catalogó como popular. Este vals habla de doña Victoria Angulo Castillo, distinguida señora de raza negra y amiga de Chabuca, inspiración principal para dicha canción.
LA FLOR DE LA CANELA
Déjame que te cuente (déjame que te cuente...) limeño,
dejame que te diga la gloria del ensueño que evoca la memoria
del viejo puente, del rio y la alameda.
Déjame que te cuente limeño,
Ahora que aún perfuma el recuerdo,
Ahora que se mece en un sueño,
el viejo puente, el rio y la alameda.
Jazmines en el pelo y rosas en la cara,
Airosa caminaba la flor de la canela,
Derramaba lisura y a su paso dejaba
aromas de mistura que en el pecho llevaba.
Del puente a la alameda menudo pie la lleva
Por la vereda que se estremece al ritmo de sus caderas.
Recogía la risa de la brisa del río
y al viento la lanzaba del puente a la alameda.
Déjame que te cuente limeño,
Ay, deja que te diga, moreno, mi pensamiento,
A ver si asi despiertas del sueño,
del sueño que entretiene, moreno, tu sentimiento.
Aspira de la lisura que da la flor de la canela,
adornada con jazmines matizando su hermosura;
alfombra de nuevo el puente que engalana la alameda
que el rio acompasará su paso por la vereda.
Y recuerda que...
Jazmines en el pelo y rosas en la cara,
airosa caminaba la flor de la canela,
derramaba lisura y a su paso dejaba
aromas de mistura que en el pecho llevaba.
Del puente a la alameda menudo pié la lleva
por la vereda que se estremece al ritmo de sus caderas.
Recogía la risa de la brisa del río,
y al viento la lanzaba del puente a la alameda.
A principios de la década de los 60 viajan a España, donde adquieren una enorme popularidad y donde finalmente se instalan en 1965. Quince años después, Casto Darío abandonaba la formación lo que precipitó el definitivo declive del grupo.
Del disco de 1960, "Los 3 Sudamericanos, El Cantar de Sudamérica", y de la autoría de la gran Chabuca Granda, Los Tres Sudamericanos nos ofrecen "La flor de la canela", popular tema que ha sido interpretado por muchos artistas, tanto en versiones cantadas como instrumentales. Los Tres Sudamericanos lo sacaron de nuevo en un EP fechado en 1966 como se ven en las portadas adjuntas.
La flor de la canela es un vals peruano compuesto por la cantautora Chabuca Granda y que se ha convertido en una de las más representativas del Perú.
Chabuca Granda registró como la fecha final de su obra el 7 de enero de 1950. Esta canción fue la que la lanzó a la popularidad. Siempre se catalogó como popular. Este vals habla de doña Victoria Angulo Castillo, distinguida señora de raza negra y amiga de Chabuca, inspiración principal para dicha canción.
LA FLOR DE LA CANELA
Déjame que te cuente (déjame que te cuente...) limeño,
dejame que te diga la gloria del ensueño que evoca la memoria
del viejo puente, del rio y la alameda.
Déjame que te cuente limeño,
Ahora que aún perfuma el recuerdo,
Ahora que se mece en un sueño,
el viejo puente, el rio y la alameda.
Jazmines en el pelo y rosas en la cara,
Airosa caminaba la flor de la canela,
Derramaba lisura y a su paso dejaba
aromas de mistura que en el pecho llevaba.
Del puente a la alameda menudo pie la lleva
Por la vereda que se estremece al ritmo de sus caderas.
Recogía la risa de la brisa del río
y al viento la lanzaba del puente a la alameda.
Déjame que te cuente limeño,
Ay, deja que te diga, moreno, mi pensamiento,
A ver si asi despiertas del sueño,
del sueño que entretiene, moreno, tu sentimiento.
Aspira de la lisura que da la flor de la canela,
adornada con jazmines matizando su hermosura;
alfombra de nuevo el puente que engalana la alameda
que el rio acompasará su paso por la vereda.
Y recuerda que...
Jazmines en el pelo y rosas en la cara,
airosa caminaba la flor de la canela,
derramaba lisura y a su paso dejaba
aromas de mistura que en el pecho llevaba.
Del puente a la alameda menudo pié la lleva
por la vereda que se estremece al ritmo de sus caderas.
Recogía la risa de la brisa del río,
y al viento la lanzaba del puente a la alameda.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)